Una distinción que debemos tener especialmente en cuenta son los “tiempos fuera”. A veces el silencio se utiliza para agredir o amenazar al otro miembro de la pareja. Cuando no pueden manejar la conversación, el conflicto o la pelea que están teniendo, suele suceder que uno de los dos deja de hablar, o se retira del espacio común sin tomar una posición clara acerca de lo que piensa hacer respecto al tema que los está ocupando. Esto es un motivo de conflicto bastante grave, en especial si se convierte en una costumbre para terminar las discusiones.